* Nuria Lorite Ayán, autora del presente artículo, es Doctora en Farmacia; licenciada en Medicina Tradicional China; Doctora y Técnico Superior en Terapias Naturales (Naturopatía) y una de las mayores especialistas mundiales, reconocida como principal autoridad occidental en la materia por el Gobierno de Pekín, que le ha dispensado toda clase de honores oficiales.
La doctora Lorite Ayán, de nacionalidad española, fue la única doctora occidental en Medicina Tradicional China que inauguró las actividades divulgativas de la especialidad en el Centro Cultural de la embajada china en España. Ha sido la única representante de España, y en ocasiones única occidental, invitada en foros internacionales de Medicina Tradicional China. Dirige y presenta el programa “La vida biloba” en Libertad FM, que acaba de cumplir dos años en antena, batiendo récords de descargas de podcast de cada emisión.
El próximo mes de mayo iniciará un curso avalado por la Bircham International University, Universidad que figura en el “Top 10” mundial de las instituciones sin ánimo de lucro que ofrecen educación superior a distancia para adultos. El curso se titula “Inmunomodulación e Inmunomoduladores, Avances en Nutracéuticos y Otros Complementos” (más información aquí).
Con motivo del Día Internacional de la Mujer, la doctora Nuria Lorite escribe para este periódico.
- No, no va de la conciliación de los tiempos, sino de la conciliación del Ser.
Mujeres. Somos distintas, somos iguales. La Magia del tiempo se urde en nosotras. Transformadoras y transmutadoras intelectuales, biológicas, artísticas, sustentadoras, arrebatadoras, gestoras o gestantes, faros y linternas; dueñas del poder del cambio, dueñas del poder de gobernar, arriba y abajo, llenas y vacías, crecientes y menguantes, guerreras y tejedoras, diosas y humanas.
- Somos mujeres poderosas, valientes, resilientes, líderes, adaptables: nada ni nadie puede destruir a la Mujer.
Somos la tierra que todo lo genera, sostiene y sepulta lo inservible; el agua que da vida y arrastra los escombros; el fuego de la risa y del deseo. La sutileza de la brisa de Afrodita y la fuerza desbocada del dolor del huracán Medusa. Somos los brotes tiernos de la renovación y las raíces viejas y profundas de la sabiduría. Las flores. El carbón simple que da energía, esperándote en el fondo de la sima y el diamante, forjado bajo presión esperándote en el fondo del laberinto más oscuro. Somos. Estamos. Aquí y Ahora. Siempre. Porque todas somos necesarias. Porque cuando las Mujeres, todas nos reconciliemos con nosotras mismas, con nuestra esencia y nuestro Sol y los Hombres se reconcilien con el germen de Luna en su interior, Todos viviremos reconociendo que somos necesarios, sin miedo, libres, felices. Pues los frutos siempre son el resultado de lo Femenino y lo Masculino.
La especie se acaba, la humanidad se acaba si no nos aliamos, respetamos, amamos y veneramos.
- A todas, lo que corresponde. Vivamos, ni debajo ni encima. A la par.
Conciliar no es sólo cuestión de horas. Sino de comprender que cuando una mujer anula o reprime su feminidad, sea como sea, se muere un poco y enferma.
Los gobiernos han de comprender. Hemos de reclamar.
La Mujer, enferma. Soledad, maltrato, fatiga crónica, fibromialgia, endometriosis, quistes mamarios y ováricos, infertilidad, depresión, ansiedad, desilusión, lucha, defensa, miedo, frustración, cáncer, autoinmunidad, sensibilidades múltiples varias. Enferma de falta de sí misma. Enferma de tirar de sí misma. Agotada por defenderse, por demostrar. ¿Demostrar? ¿Qué? ¿Qué valemos? ¡Valemos! ¡Somos! ¡Podemos!
En el siglo XXI, basta ya. Conciliación y reconocimiento.
Dra. Nuria Lorite Ayán
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